Hace mucho mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana, miles de millones de estrellas brillaban poderosamente. Acelerando el tiempo hasta hoy – increíblemente 35 millones de años más tarde – finalmente la luz proveniente de esas estrellas cruzó el Universo y llegó hasta la Tierra. La luz viaja más rápido que cualquier otra cosa en el Universo, pero aún así le toma tiempo viajar por el espacio. Después de un viaje así de épico, es justo que los astrónomos capturen la luz para poder hacer esta bella nueva imagen de esta galaxia distante.
En la foto podemos ver que el color de la galaxia es diferente en el centro que en las regiones externas. La galaxia se ve más amarilla y naranja hacia el centro (los astrónomos dicen que es “rojiza”), mientras que es azul en las partes exteriores. Las estrellas más viejas son más rojas que las estrellas más jóvenes y viven en el centro. Las estrellas jóvenes son azules y viven más alejadas.
Pero cuando miras el cielo nocturno, ¿porqué la mayoría de las estrellas parecen blancas, en vez de tener una maravillosa gama de colores? Esto es porque la luz de la mayoría de las estrellas distantes es tan débil, que cuando nos llega finalmente, el detector en nuestros ojos que recoge colores, no funciona. ¡Así que solamente podemos ver las estrellas en blanco y negro! Sin embargo, podemos ver algunas de las estrellas más brillantes con visión a color, así como la estrella roja Betelgeuse y la estrella azul Rigel, que se encuentran ambas en la constelación de Orión.
Dato curioso
: Las estrellas vienen en muchos de los colores del arco iris: azul, amarillo, naranja y rojo – así como algunas estrellas que realmente son blancas. ¡Pero no existe ninguna estrella verde!
Información adicional
Este Space Scoop está basado en un comunicado de prensa de ESO.
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